La fitoterapia se convierte, en muchas ocasiones, en un buen remedio para mejorar problemas de salud. Puede aliviar síntomas, pero también puede curar o reestablecer el equilibrio en el organismo. Pero es muy importante que sepamos que de forma aislada los beneficios van a ser muy limitados. Las propiedades que las plantas aportan se van a ver potenciadas si atendemos nuestro cuerpo de forma holística, es decir, debemos nutrirnos adecuadamente, llevar un estilo de vida saludable, relajar la mente y sanar las heridas que pueden estar influyendo en los malestares del ciclo menstrual... En muchas ocasiones, unos cambios en la nutrición y en la gestión emocional pueden hacer mucho más que la mejor medicina.
Quería hablaros hoy aquí de una hermosa planta mediterránea que, ya desde la antiguedad, ha contribuido a mejorar la salud del ciclo menstrual. Se trata del Vitex Agnus-Castus (Sauzgatillo o árbol casto), recibe este "apodo", porque en la antiguedad fue utilizado con intención de suprimir la libido de los monjes. No sabemos si lo consiguieron, lo cierto es que, afortunadamente, no tiene ese efecto en las mujeres. Está indicada en la amenorrea, especialmente si es hipotalámica, en el llamado síndorme premenstrual, en la dismenorrea o dolor menstrual, tras haber dejado anticoncepción hormonal para reanudar el ciclo natural (recordemos que con anticonceptivos hormonales no hay ciclo menstrual ya que no hay ovulación, sólo existe un sangrado de deprivación a conveniencia), también es útil en la etapa del climaterio, en casos de déficit de progesterona e hiperestrogenización y, de modo general, en diferentes desequilibrios hormonales que tengan relación con el eje hipotalámico-hipofisario-adrenal (HHA).
Se trata de un adaptógeno, que en medicina herbal, significa que funciona ayudando al cuerpo a adaptarse al estrés, por lo tanto, regulando el eje HHA. Va favorecer la ovulación protegiendo al hipotálamo del estrés crónico y evitando que la glándula pituitaria produzca demasida prolactina, si se da hiperprolactinemia se inhibe la ovulación y si esta hormona está elevada de forma moderada o leve puede provocar ciclos menstruales irregulares, dolor mamario, disminución del deseo sexual y exceso de andrógenos, entre otros problemas. Existen muchos factores que pueden elevar esta hormona y el estrés es uno de ellos, es por ello que, además de la ayuda del Vitex, es fundamental ir a la raíz del problema y trabajar de forma holística cada caso. Además, la suplementación y las hierbas medicinales no debe ser algo de por vida, en concreto, no se recomienda tomar Vitex durante más de 6 meses de forma continuada. Nunca bajo algún tratamiento hormonal y tampoco es recomendable tomarlo si se tiene menos de 18 años (aunque aquí habría que valorar también la edad de la menarquia) y, por último, se debe administrar con supervisión profesional y atendiendo a las dosis adecuadas a cada caso. En esto os puede orientar Ana de ginevitex.
A sí que... No dejéis de aprovechar los numerosos beneficios de las plantas, pero siempre con conocimiento y entendiendo que su riqueza y potencial está conectado con el propio autoconocimiento consciente y la comprensión compleja e integral de nuestro gran templo vital: este cuerpo que nos sostiene.
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